6 de marzo de 2011
El miedo a reclamar lo propio
Hoy han surgido muy diversos temas, y casi todos relacionados con el mundo del trabajo, y en consecuencia, con el derecho laboral, situaciones de conflicto, violencias empresariales, claúsulas contractuales ilegales, excesos de jornada, casos extremos de abuso frente a la parte más debil de la relacion laboral, etc. Todos estos temas y muchos otros los iré tratando en mis próximos artículos, pues cada día estoy más convencido de la necesidad de clamar y manifestar lo que uno piensa sobre la situación del derecho y el mercado laboral en España, pero eso será en los próximos días.
Hoy sin embargo hablaré en pocas palabras del miedo, del miedo que tenemos a ejercer nuestros derechos, a pedir un permiso porque nuestra pareja tiene que acudir a urgencias, a solicitar el disfrute de la paternidad, a pedir que tu empresa entienda que con ocho meses una mujer embarazada no está en condiciones de acudir a su puesto de trabajo, a que seas despedido por haber presentado una demanda, a la imposición de tener que hacer horas extras de forma sistemática, a reclamar tus vacaciones, etc.
En alguna ocasión he oido que la felicidad es la ausencia de miedo, y creo que estas palabras no van del todo desencaminadas, simplemente, no podemos resignarnos, las generaciones pasadas han luchado para dejarnos un legado, un legado en forma de derechos, no sólo políticos, sociales y económicos, sino también laborales, derechos que sino ejercitamos se acabarán perdiendo, no porque nos los hayan arrebatado, sino simplemente, porque hemos decidido dejar de ejercerlos.
El artículo de hoy puede parecer pesimisita, pero sin embargo su objetivo es totalmente opuesto, es una llamada a a la normalidad, un mensaje destinado a recordar que los derechos también existen en el ámbito laboral, y que debemos ejercerlos, reclamar lo que es de uno no es enfrentarse al empresario, sino simplemente disfrutar de los derechos derivados de un contrato.
En próximos artículos abordaré muchos temas que han surgido esta tarde, como siempre espero vuestros comentarios y opiniones.
11 comentarios:
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Globalizacion, grandes avances y grandes retrocesos sociales. Tenemos muchos derechos,pero cuando se trata de los laborales, de los que afectan a nuestra nomina, porque tenemos mjedo. Que esta en nuestras manos para solucionarlo? Esperamos tus proximos articulos y poder debatir entre todos.
ResponderEliminarNi te imaginas lo que puede "atar" una hipoteca, no hay "matrimonio" que dure tanto. 50 ó 30 años de fidelidad absoluta que no te permite alzar la voz o la vista en el trabajo porque si haces algo que provoque la irritabilidad del empresario y te falta el alimento que necesita esa bicha te quedas literalmente en la calle.
ResponderEliminarReconozco que la hipoteca ata, en mi caso 35 años, pero también atan los hijos, el coche, la cesta de la compra, etc. Pero a pesar de todo, si renunciamos a lo que nos es legítimo, al nucleo de derechos que surgen del contrato entre trabajador y empresario, estaremos, por un lado, dejando un triste futuro para los que vengan detrás, y por otro , renunciando a vivir nuestra propia vida, con lo que ello conlleva de destrucción anímica y familiar.
ResponderEliminarReconozco que la hipoteca es una gran parte, si bien creo que la conjuncion de varias circunstancias nos atan y nos callan= el coche, las vacaciones,salir,las cenas,las copas,los moviles nada mas y nada menos que 700 eur de media por tlf al ano... Creo que el cosumismo es lo que nos ata...hipoteca+crisis+consumismo es la combinacion letal que nos hace sumisos y esclavos de la globalizacion,como marionetas manejadas por los poderes economicos que nos han puesto la zanahoria y tras picarla nadie puede bajar su carro de vida, convertidos en simples marionetas. Curioso ver como todos nos movemos en la misma direccion, como el dia de las rebajas,a las 10 todos calle urzaiz abajo y a las 2 todos calle urzaiz arriba, como hormiguitas...Somos muy previsibles y por tanto debiles.
ResponderEliminarHemos pasado de ser animales sociales a ser simplemente elementos componentes de una sociedad animal...no podemos dejar de hacer tal o cual cosa porque perdemos posición en esa jerarquia social recien adquirida, y esa es la gran soga que nos ata....
ResponderEliminarRealmente hay cosas necesarias, aunque la mayor parte de estas que tanto nos coartan nuestra libertad no son imprescindibles...somos la sociedad que más ladrillo compra incluso en crisis..."el alquiler es tirar el dinero"..."como no me voy a comprar este ipod si casi me sale regalado"....
No nos damos cuenta de que lo más grande que tenemos es la libertad de decisión con la que podremos alcanzar la felicidad,si vendemos esa libertad o la supeditamos a esos propietarios de nuestra hipoteca, de nuestro crédito personal y en definitiva a quien tiene en su mano nuestra nómina mensual lo estamos perdiendo todo.
Reivindicando nuestros derechos y los de nuestros iguales es la única solución...ya solo nos queda dar con la fórmula magistral para que todos se conciencien de que hoy es un compañero...mañana somos nosotros.....
Si das con esa fórmula te garantizo quedarás por siempre en la história........
Enhorabuena por el trabajo.
Con todos mis respetos, no estoy de acuerdo con lo que acabo de leer. Es más, os recomiendo encarecidamente que leais 1984 de George Orwell, tal vez pueda ayudarnos a entender mejor nuestra sociedad actual.
ResponderEliminarDigo que no estoy de acuerdo con lo que acabo de leer porque, si bien es cierto que muchos de nuestros gastos los decidimos nosotros,y no tenemos porque generarlos, no es menos cierto que el ser humano es un animal de sociedad y de grupo. Obviamente que puedo vivir sin un móvil, sin un ordenador, sin un coche, sin una hipoteca, etc. pero no seamos hipocritas, vivir sin esos bienes nos deja al margen de la sociedad, y tal vez el aislamiento pueda ser más destructivo que el propio sistema.
Dicho esto, también me parece muy bien luchar por nuestros derechos, pero una vez más, hacerlo de forma individual es justamente lo que espera el sistema, para castigarte y utilizarte de ejemplo ante los demás. Esta via no nos conduce a ningún sitio. Con lo cual me parece muy bonito animar a la gente a defender sus derechos, pero esto, en la actualidad, es hacerles un flaco favor. Las consecuencias pueden ser terribles.
El problema es la alianza que existe actualmente entre politicos, sindicatos, bancos y prensa. Estos 4 son los que dirigen la sociedad, incluso por encima de las empresas (antiguas reinas del trono). Y me preguntareis cómo se puede romper esa alianzas? Desde mi punto de vista es sencillo, y está en la mano de todos. No votemos por ningún partido (seamos sinceros, ninguno nos representa), no leamos la prensa mayoritaria, no nos afiliemos a los sindicatos (total para qué? para que te defiendan sus abogados de forma gratuita? Pero si con el dinero que les pagamos todos los meses, el abogado nos sale regalado!), y por último intentemos no dejarle nuestro dinero a los bancos (estos lo utilizan en su propio beneficio, no en el nuestros!).
La cuestión es: de verdad queremos cambiar o nos gusta hacernos las victimas?
Veo que este artículo sigue generando polémica, síntoma de que el mundo camina en una dirección y los ciudadanos que lo componen por otra muy diferente. Todos estamos de acuerdo en que la situación es simplemente insostenible, la cuestión es como hacerle frente, de un modo rádical mediante el boicot a las instituciones y poderes fácticos, o bien de un modo más pausado intentando hacer valer nuestros derechos de un modo natural.
ResponderEliminarPERO DE TODAS LAS RELACIONES LABORALES EXISTENTES LA MAS PERJUDICADA ES LA QUE EJERCE EL TRABAJADOR DOMESTICO.. ME GUSTARIA MAS INFORMACION SOBRE ESTE TEMA Y SU TRATAMIENTO EN ESPAÑA, QUE REGIMEN JURIDICO PROTEGE AL TRABAJO DOMESTICO? Y TU TRATAMIENTO PROCESAL.. GRACIAS.
ResponderEliminarGracias por tu aportación, prometo tratar en un próximo post el régimen especial de las empleadas/os de hogar. Un saludo
ResponderEliminarHoy por hoy somos los funcionarios los unicos que podemos pedir nuestros derechos laborales sin miedo al despido y que las madres trabajadoras podamos disfrutar de verdad de la conciliacion. Por eso entiendo tan bien a todas mis amigas y desconocidas que esperan aprobar una oposicion para tener un hijo. ES una pena pero es asi...
ResponderEliminarEs cierto que ahora mismo son los empleados públicos los que menos miedo tienen a reclamar, su estatus le genera confianza en este sentido, pero también es cierto que las Administraciones Públicas son especialmente incumplidoras de la legislación laboral, mi experiencia me dice que mucho peor que la mayoría de las empresas.
ResponderEliminarDe todos modos, aunque la gente no se precipite en reclamar, es bueno que acuda a un abogado a comentar sus inquietudes, por lo menos para saber como actuar. Si algo te duele acudes al médico, no esperas a estar moribundo,pues lo mismo debería ser en materia laboral, acudir a un especialista a que resuelva tus dudas antes de que sea demasiado tarde.
Un saludo